C37 Conmigo no se juega
Cambell no podía creer que Emma rechazara a su hijo de aquella manera, salió de la habitación sumamente molesto, pidió al médico que no volvieran a acercar a su hijo a su madre, afuera lo esperaba Thara que se encontraba visiblemente emocionada por el nacimiento del bebé.
—Escuche el llanto del bebé, ¿qué tal está?, ¿cómo es?
—Que puedo decir si soy el padre, es el bebé más hermoso que he visto