C30 CAPÍTULO 30 .
Arrugué el recorte de periódico entre mis manos y con mucha fuerza, mientras dejaba ir la rabia y el dolor que me estaba invadiendo. La angustia y la decepción acechaban cada parte de mi cuerpo. Era como estar en medio de una historia de terror. La lluvia caía incesantemente y mis lágrimas también.
Negué con la cabeza repetidas veces para dejar ir la sensación tan extraña que se apoderaba de mí