C64 CAPÍTULO 64.
Los vellos de mi cuerpo se erizaron y el miedo provocó que mis manos empezaran a temblar, mi respiración se tornó agitada y desenfrenada y la rabia comenzó a infiltrarse por mis venas carcomiendo cada centímetro de ellas.
El silencio se apoderó del ambiente y en mis oídos solo retumbaban los latidos de mi corazón. Alex resopló y se levantó de inmediato