C3 El mismo sitio

Samuel

Salí a tomar aire, estaba asombrado mirando tan hermoso paisaje, dándole sorbos a mi cóctel, las Bahamas, pensé y de pronto una gran sonrisa se me poso en mis labios y mi corazón empezó a latir de manera enérgica.

¿Qué tipo de persona toma un vuela a un destino al que nunca pensó ir, solo por unos hermosos ojos grises que le hicieron ver y sentir todo de otra manera? Ese aroma girando alrededor de mi mente, haciéndome tener dificultad para respirar los últimos días, recordar su mirada hace que mi mundo de un giro de 180 grados, hacen que deje todo por esos ojos hipnotizantes.

Me dije a mi mismo que necesitaba unas vacaciones, un descanso urgente, pero sé que solo fue una mera excusa ya que si ese hubiese sido el caso hubiera ido a otro lugar, y no precisamente donde está mi hermana con su amiga, ¿le pareceré un acosador?

Me termine el resto del cóctel y me aleje del mirador, por momentos pensé que me había vuelto loco, ya que solo la he visto una sola vez y he cruzado medio océano por volver a verla, pero la verdad es que no me la he podido sacar de la mente desde el día que la conocí, y las cosas no terminan allí ya que al pensarla me pongo muy duro. En mi mente la he desnudado y he hecho mía muchas veces y de diferentes formas, no sé si la abstinencia es la que me lleva a pensar cosas así, pero con solo cerrar los ojos su imagen me viene a la mente y sueño con tenerla debajo de mí, y recorrer todo su cuerpo.

Hace más de 8 años me hice una promesa a mí mismo, no tendría relaciones sexuales con nadie, hasta que llegue la indicada la que me haga perder la razón y me lleve a hacer locuras por ella, la que vaya a ser mi esposa y que desee compartir su vida conmigo.

Ocho años en abstinencia es mucho tiempo si se podría decir, las duchas frías me ayudan y también en las noches de soledad mi mano me ayuda, aunque no es lo mismo que estar en medio de unas hermosas piernas. Mi pene necesita diversión y lo pide a gritos, pero quiero ser fiel a mi promesa, debe esperar ya que la próxima mujer que este en mi cama y en mis brazos será la madre de mis hijos mi esposa, y para variar mi mente quiere que esa mujer ser Jessy.

Llame a mi hermana, se llevará una gran sorpresa al saber que estamos en el mismo lugar, aunque ella desde un principio deseaba que yo viniera con ella yo me negué ya que le supe decir que era un viaje de amigas y que se divirtiera mucho. Pero a fin de cuentas aquí estoy al saber quién formaba parte del viaje decidí a venir lo más rápido que pude. Esa hermosa mujer de ojos grises tiene mi cerebro embotado, y hace que mi sangre fluya de modo incontenible, caso contrario estaría en mi oficina trabajando, claro que mi hermana no debe saber que vine por su amiga a este viaje.

-Mi querida Lore

-¿Sami?

-Si mi hermosa, el mismo, ¿Qué dirías si te digo que estamos en el mismo lugar?

-Que dices Sami, yo estoy en Las Bahamas, ¡Espera un momento! ¡Tú también estas aquí?

-Si mi hermosa, quise venir a darle un abrazo de cumpleaños a mi querida hermanita.

-¿En dónde estás? ¿En qué hotel te hospedas?

-En el mismo que estas tu.

-No me digas mentiras, ven aquí para saber si es verdad que estamos en el mismo lugar.

Unos minutos después me recibió en la puerta de su gran habitación, la que ella compartiría con la dama que me trae la cordura en el piso.

Mi hermana estaba feliz de que estuviéramos en el mismo lugar, me abrazo, cuando de pronto escuche la voz que me tiene atolondrado, ella le decía a mi hermana que no podía bajar a la playa ya que no se sentía bien, me quede observándola y a decir verdad me preocupo el hecho de que no se sintiera bien.

El solo hecho de escuchar su voz hizo que mi miembro viril reaccionara dentro de mis pantalones, aunque no estábamos muy cerca su aroma estaba en el aire y me dejo atontado, es el mismo aroma que lleva persiguiéndome estos últimos días que se aferra a mi alma, mi corazón.

Seguía sintiendo mi incomodidad en mis pantalones, me tiene muy excitado y ni siquiera la he tocado, ni estoy cerca de hacerlo.

La saludé y ella me devolvió el saludo, pude notar su nerviosismo, me quedo claro que a ella también le causa efecto mi presencia lo pude notar en su mirada, existe química entre nosotros.

Mi hermana dedujo que me gustaba su amiga, creo que fui muy obvio, aunque más fue por los nervios que a simple vista se me notaron, le dije que su amiga era muy hermosa y que a cualquier hombre le gustaría, eso me llevo a preguntarle si había algún problema con que me guste su amiga, pero la respuesta de mi hermana fue algo que me destrozo las ilusiones por un momento.

Eres libre de que te guste cualquier persona, pero mi amiga no está disponible para ti…

Jessy está comprometida con alguien más.

Jessy

He vomitado mucho, mi hijo o hija se quiere hacer notar, todo lo que ingerí fue a dar a la taza de baño, mi estómago y garganta se sienten adoloridos y que decir de mi cabeza, pensé acompañar a mi amiga a la playa, pero el dolor de cabeza no me dejaba en paz.

Me quede dormida después de tomar algo suave para el dolor de cabeza, no quería arruinar las vacaciones de mi amiga así que le dije que fuera nomas con sus primas a tomar sol y nadar.

De pronto en mi sueño apareció Samuel sus bellos ojos, su cuerpo izo que aparecieran maripositas en mi estómago, recuerdo la manera que me vio me hizo sentir el mismo calor que la primera vez que nos vimos, él me afecta muchísimo, literalmente tenía mis piernas hechas gelatina y mis pezones se me pusieron duros, y sentí humedecer mis bragas, estaba hermoso, aunque la primera vez que lo vi estaba vestido de manera muy formal, verlo así fresco y relajado me encanto mucho más.

Aunque aún recuerde al estúpido de Alberto, él no fue mi primer beso, pero si el primer hombre en hacerme mujer, le di algo que nunca más recuperare y lo hice porque estaba enamorada, y aun me pregunto cómo pudo este imbécil fingir tanto solo para llevarme a la cama, se nota que es un experto engañando. Me daño mi corazón de la peor forma.

Cuando paso mi dolor de cabeza y pude apartar mis pensamientos negativos de mi cabeza me dispuse a bajar a la playa, caminé rumbo a donde estaba mi amiga, pero antes pude notar que una de las arpías no quería despegarse de alguien: Samuel

Ella le estaba coqueteando y diciéndole de forma directa lo mucho que él le gustaba, pero el parecía no mostrarle atención.

Mery es una chica muy guapa y siempre se ha sabido que le gustan los hombres mayores a ella, inclusive una vez dijo que se lio con un maestro con el que perdió la virginidad, aunque Samuel no es un anciano, entra en la escala de los hombres que a ella le atraen.

Cuando llegue cerca de él, dejo a un lado a Mery, aunque a ella no le hizo ni la más mínima gracia que él no le tomara atención y que la pusiera en mí, estaba muy hermoso, casi sin ropa, impresionante, sentí que se me seco la garganta y que mis partes se empezaban a humedecer, al ver su abdomen plano y su sixpack que producía tocarlo y hasta lamerlo, exquisito.

Él se acercó a preguntarme si me sentía mejor, y yo solo pude asentir, ya que si lo seguía mirando se daría cuenta que me lo quería comer con los ojos. Y justamente la manipuladora de Mery no dejo que nuestra conversación siguiera su curso ya que lo halo para que la acompañara a ver unas bebidas a la barra del hotel. Así que yo aproveché a ir al agua para darme un baño, algo de desilusión se alojó en mi pecho al buscar con la mirada a Samuel con Mery y no los encontré, en ese momento muchas ideas se me vinieron a la cabeza.

-¿nauseas? No me digas que estás embarazada nueva pobre – hablo la arpía mayor.

-Respétala, no tienes por qué hablarle así. – Hablo Lore

-Bueno como sea, ahora contéstame ¿estas embarazada? – hablo la arpía de nuevo.

-¿Embarazada? – Ahora fue Samuel el que hablo.