C6 SUEÑO SALVAJE
CAPÍTULO 6
PESADILLA
Estaba lavando los platos cuando, de improviso, unos brazos imperiosos me envolvieron el torso por detrás. La familiaridad, y quizás, el anhelo de ese contacto despertaron un torbellino de emociones que me hicieron temblar en su abrazo. Me giré para enfrentarme a mi armadura, mi príncipe azul, ¡mi caballero resplandeciente! Su imponente figura se alzaba sobre mí