C3 ¿Quién es ella?

"Ziyan Qing... Ziyan Qing... ¡él está aquí, Dios mío, él está aquí, finalmente ha llegado, mi príncipe azul está aquí!"

El estridente y claro grito de las mujeres rescató su alma perdida. Recobró la conciencia y observó a su alrededor: la gente reía, disfrutaba, bebía y gritaba su nombre. Volvió a mirar hacia las escaleras, pero no vio a ninguna chica ni chico. Solo estaba el grupo que disfrutaba de la fiesta. La sorpresa en su rostro era evidente. Podía apreciar el esfuerzo que su madre había puesto en la preparación. Se tocó las cejas, frustrado. Lo que acababa de sucederle, por qué su pasado lo acosaba de nuevo, por qué ella volvía a su mente. Justo cuando se sentía irritado consigo mismo, la señora Qing, su madre, se acercó con elegancia, lo abrazó y sus ojos se llenaron de lágrimas. Ziyan Qing correspondió el abrazo y sonrió.

"Madre, ya estoy aquí, no hay motivo para llorar. Te ves hermosa con una sonrisa, no con lágrimas".

Madre e hijo se reencontraron después de mucho tiempo. Cada vez que el señor Qing extrañaba a su hijo, tenía que volar de regreso al país A. Tras siete años, su hijo había vuelto a casa, ¿cómo no iba a llorar de alegría? Era el momento más precioso para ella. Jamás imaginó que su hijo regresaría a su hogar. Ni siquiera Ziyan Qing había pensado que volvería a esta casa en su vida. Madre e hijo se abrazaron largo rato.

Para él, su madre era su mundo entero. Tras la muerte de su padre, ella lo era todo. Su padre falleció hace siete años, cuando él era solo un adolescente. Su vida estaba exenta de preocupaciones y desafíos, pero antes de que pudiera disfrutar de su juventud, tuvo que asumir la responsabilidad de una compañía renombrada y cargar con el bienestar de miles de familias que trabajaban para su padre. Trabajó incansablemente día y noche para mantener el prestigio y la prosperidad de la empresa, un legado del esfuerzo de su padre y su abuelo.

Su padre era Ryan Qing, el empresario más distinguido y reconocido. Ocupaba el segundo lugar entre los magnates de negocios más influyentes del mundo en aquel entonces. Sin embargo, su vida se truncó demasiado pronto. Después de la muerte de su padre, él logró elevar su agonizante empresa hasta la cima de la lista de las compañías más destacadas del mundo, y todo esto a la temprana edad de 20 años. Se entregó al trabajo incansable, día y noche, realizando innumerables sacrificios. Tras el fallecimiento de su padre, su madre se convirtió en su principal pilar y fuente de inspiración.

La señora Qing observó a su hijo y le dedicó una sonrisa tierna.

"No puedo creer que estés aquí".

Acarició el rostro de su hijo y lo abrazó de nuevo. Lo condujo hacia el interior del salón, donde la gente se acercaba uno tras otro con una copa de vino para saludarlo. Todos buscan beneficios en la vida. Algunos se acercaron con propuestas de negocios, otros para presentarle a sus hijas y algunos más en busca de ayuda. Él, que ya era un hombre de negocios y un adicto al trabajo, se sumergió de lleno en el ambiente empresarial y comenzó a entablar conversaciones con las élites del sector.

"Señor Qing, es un placer tenerlo de vuelta en el país. Será muy conveniente para futuros negocios", comentó alguien.

Otra persona añadió: "Sí, señor Qing, tengo un excelente plan de negocios para los terrenos meridianos en la ciudad B".

Un tercero intervino: "Pero esa tierra fue motivo de controversia el año pasado. Aún no se ha aclarado la situación. De hecho, tengo un plan excelente, ideado por mi hija".

Todos conversaban y se lanzaban pullas entre sí. Sin embargo, Ziyan Qing no era alguien que ignorara la diferencia entre lo correcto y lo incorrecto.

"Ziya, hijo mío",

Un hombre de cincuenta y cinco años se acercó y lo abrazó. "Finalmente has vuelto al país, hijo. Estoy tan contento de tenerte de vuelta, ahora puedo liberarme de las responsabilidades y pasarte las riendas del negocio".

Después de que Ziyan Qing dejara el país, su segundo tío fue quien se hizo cargo de la compañía en su ausencia, aunque él mismo gestionaba todos los asuntos de la empresa desde el extranjero. Su tío era uno de los hombres más confiables dentro de la organización.

"Tío, nunca te librarás de tu responsabilidad; es tu esfuerzo incansable el que me permite asegurarte que puedo trabajar con libertad en mercados internacionales."

"¡Jajaja, pilluelo! No piensas tener compasión de este anciano, ¿verdad?"

"De ninguna manera."

"Esa es la actitud, Ziyan. ¿Cómo podría él vivir cómodamente si yo aún tengo que esforzarme tanto?"

Su tercer tío posee una cadena de restaurantes alrededor del mundo.

"¡Hermano, vaya que alegría que por fin llegaste!"

Una chica radiante de felicidad lo abrazó y comenzó a tomarse selfies; era la hija de su segundo tío.

Ziyan Qing extendió la mano y le quitó el teléfono.

"No se pueden tomar fotos."

Borró todas las imágenes del teléfono.

"Hermano, ¿cómo voy a alardear con mis amigos y demostrarles lo guapo que es mi hermano?"

"No hace falta, todo el mundo sabe que tu hermano es el hombre más guapo del planeta."

Las tías lo afirmaron mientras lo abrazaban. La prima gemela, hija del tercer tío, también lo abrazó.

"Hermano, te hemos extrañado."

"Y yo a ustedes."

Disfrutaban de una charla amena; era un momento muy especial para todos, ya que el miembro más querido e importante de la familia estaba con ellos. Desde su niñez, había sido el príncipe de la familia, amado entrañablemente por todos. En medio de la diversión, la señora Qing se acercó, tomó del brazo a su hijo y se disculpó con todos.

"Disculpen, necesitamos un momento."

Llevó a su hijo aparte, soltó su brazo y le sonrió radiante mientras le susurraba al oído.

"Tengo un regalo para ti."

Dirigió la mirada hacia una joven que estaba de pie, vestida con un elegante traje blanco. Tenía un rostro delicado y una figura esbelta. La chica era tan hermosa que ningún hombre podría resistirse a su encanto. Se giró y caminó hacia Ziyan Qing con una sonrisa elegante en su rostro. Él avanzó y la recibió en sus fuertes brazos. Todos los invitados que presenciaron la escena se sorprendieron y los cuchicheos no se hicieron esperar.

"¿Quién es ella?"

"¿Quién es esta mujer?"

"Parecen la pareja perfecta, como sacada de un cuento."

En sus rostros se reflejaban expresiones de envidia, sorpresa y admiración.

En medio del tumulto, alguien susurró:

"¿No es ella la novia del señor Qing?"

De repente, la gente recordó que, años atrás, cuando Ziyan Qing todavía estaba en el instituto, había presentado a esa chica como su novia. Y aún seguían juntos. El magnate Ziyan Qing y la diosa de las pasarelas, la famosa modelo Xia Denzong, seguían siendo una pareja.

Ziyan Qing no salía de su asombro al verla hoy. ¿No debería estar en París? Antes de que pudiera formular pregunta alguna, ella le dijo: "Mamá me invitó, pero me ha sorprendido verte. Nunca me dijo que regresarías al país. Al fin estás aquí".

Justo cuando iban a tener una conversación más íntima, él recibió una llamada de un número desconocido. Le sorprendió, pues nunca antes había recibido llamadas falsas o de números desconocidos en su línea privada.

"¿Será ella? ¿Después de tantos años ha decidido llamarme? ¿Es posible?"

Con esa idea rondando su mente, contestó la llamada de inmediato.

"Hola... hola... ¿Eres tú?"