C7 No me molesten

Capítulo 7 No me molesten

Xia Xingyan, fingió palmear a su padre en el pecho para consolarlo: "Papá, cálmate, no te enojes. Ya que está de vuelta y no podemos echarla. Además, ese niño es inocente, considéralo tu nieto. "

Ella deliberadamente hizo hincapié en la palabra "nieto", lo que irritó a su padre mucho más.

Xu Hao se situó en un lado y observó la escena caótica de la familia. Se quedó mirando al niño parado detrás de Xia Xingcheng, cuyas pupilas eran negras y brillantes De repente, recordó al hombre que apareció junto a ella el día de ayer.

Apretó los puños mientras la frialdad en su corazón se hacía más profunda. Las olas en sus ojos parecían estar a punto de desbordarse.

Después de todo, él había estado con ella varios años. A pesar su relación se había terminado debido a ese incidente, todavía no podía dejar de pensar en esa mujer.

Xingcheng miró a su familia con un rostro inexpresivo. La amargura que sentía continuaba fluyendo, pero ella trataba de contenerlo y refrenarlo.

Había previsto una situación de este tipo, pero cuando realmente sucedió, no pudo evitar sentir mucho dolor.

Nadie sabía cómo fue su vida cuando llegó al extranjero. Era tan pobre que no tenía dinero para comer, no podía encontrar un lugar para dormir, e incluso tenía solo una comida al día con el fin de ahorrar dinero.

Había sufrido todo tipo de dificultades, aunque casi muere en la calle, nunca nadie la llamó para preguntarle si vivía bien en el extranjero.

Su corazón ya había muerto en aquel entonces. No le importaba si su padre se negaba a aceptar al niño.

"Xiaobao es mi hijo”, Xingcheng suspiró profundamente, suprimiendo el pasado en el fondo de su corazón. "Si lo aceptas o no, no es asunto mío."

"He vuelto esta vez solo para asistir a su banquete de compromiso. Tan pronto como el banquete termine, me retiraré de inmediato."

Su padre la miró con odio, como si estuviera mirando una pila de basura: "Escucha, tú puedes asistir, pero definitivamente no puedes llevar a tu hijo. ¡Qué vergüenza! ¡No te atrevas a manchar la honra de nuestra familia!"

A Xingcheng en realidad no le importaba si podía llevar al niño a asistir al banquete de compromiso en absoluto.

No sentía nada más que disgusto por la situación actual.

Aceptó, se dio la vuelta y se fue con Xiaobao. Ni siquiera entró en la sala de estar y , sin lástima alguna, abandonó la casa en la que había vivido durante veinte años.

Xingcheng bajó la cabeza y miró el reloj, todavía era temprano. Planeaba volver a la casa de su abuela y aprovechar para comprarle algunos muebles.

Estaba pensando en detener un taxi en la intersección, pero Hao la siguió a toda prisa y la detuvo.

"¿Ahora qué?"

Ella cruzó los brazos con frialdad, parecía que no quería hablar con él.

Al ver su expresión, Hao se molestó. Fue ella quien ligó con otro hombre, sin embargo, ahora no se sentía avergonzada de hablar con él de esa manera.

"Te pregunto." Su voz tenía un tono enfadado incontrolable mientras miraba fijamente los ojos de Xingcheng, "¿Qué querías decir ayer cuando la llamaste a Xingyan repugnante?"

No esperaba que Hao todavía recordase las palabras que dijo ayer de la furia. Se quedó consternada y luego levantó la cabeza para mirarlo con indiferencia.

"¿Qué derecho tienes para llamar así a Xingyan?", al ver que ella no dijo nada, Hao apretó inmediatamente los puños y gritó con enojo: "¿No serías tú la repugnante? Cometiste adulterio en aquel entonces, y aún así tienes cara para ..."

"¡Basta, ya!"

Xingcheng no esperó a que terminara. Frunció el ceño y lo interrumpió: "Tú no eres digno de mencionar eso. Xu Hao, crecimos juntos, y nos conocemos desde hace mucho. ¡Nunca me diste ni la más mínima confianza!"

Cuando habló de lo que había sucedido en ese entonces, ella estaba tan enfadada que casi no podía respirar.

Pensaba que Hao era el hombre con el que podría vivir por el resto de su vida, pero él optó por abandonarla cuando ella estaba en su momento más vulnerable y con necesidad de cuidado.

"En ese entonces, me han engañaron y perdí mi virginidad. Sin embargo, tú me abandonaste sin preguntar. Ahora nos debemos nada. A partir de ahora, vivirás tu vida con una mujer como Xingyan".

Dicho esto, decidió no seguir hablando con él. Se inclinó y tomó la mano de Xiaobao para irse.

En ese momento, Xu Hao finalmente notó algo mal en sus palabras, extendió la mano, agarró su muñeca y preguntó ansiosamente: “¿Qué quieres decir con que te engañaron?"

Xingyan, que los había estado escuchando en secreto, finalmente no pudo soportarlo más. Salió rápidamente desde otro lado, abrazó su cintura y coquetamente dijo: "Hao, ¿por qué saliste corriendo? Pensé que estabas en problemas, vuelve conmigo, ¿de acuerdo?"

Con un rastro de pánico en su rostro, era obvio que ella no quería que su hermana revelara la verdad.

Xingcheng la miró con burla: "¡Vaya! Apareciste en el momento oportuno."

Al oír el desdén en sus palabras, Hao inmediatamente se sintió disgustado: "No tienen sentido tus palabras, ¡lo dijiste intencionalmente en contra Xingyan!"

Xingcheng no sabía qué tipo de medicina Xingyan le había dado a él para que estuviera tan convencido de sus palabras.

"Ya que confías tanto en ella, ¿por qué sigues preguntándome? Ustedes dos vivan su vida tranquilamente, ¡No me molesten!"

Xingcheng ya no podía soportarlos. Soltó esas palabras y se dio la vuelta para salir con Xiaobao.