C23 Veintitrés
Mientras Isabella recorría el siguiente pasillo con la esperanza de no haber llenado el carro con más de lo que podía permitirse, sus ojos se fijaron en el botellero.
De repente, el vino le recordó a Charles. Él prefería el whisky en un buen día, pero tampoco rechazaba el buen vino.
Cuando se detuvo y escudriñó la estantería