C511 CAPÍTULO 511 Juego de mentiras
El día 10 en el hospital, Bill recibió una llamada de un desconocido.
"Señor", George, su mano derecha le entregó su teléfono.
Bill se limitó a mirarle y luego sus ojos se posaron en su teléfono.
Sus ojos no tenían alma, como un halcón demasiado afilado y peligroso.
Sólo George podía hablar con él, ni siquiera su madre, Kelly o sus secretarias.
Nadie quería estar con él en este momento