C9 Sanders
Las lágrimas han comenzado a brotar de mi ser para recorrer con dolor mis mejillas mientras suplico que se detenga, pero las palabras terminan siendo una completa burla para el cuándo puedo sentir su piel tocar por debajo de mi blusa con desespero por sacármela de una maldita vez.
“¡Suéltame!” Grito una vez más con la esperanza de que alguien me escuche