C41 Capitulo 41
Tengo calor cuando abro los ojos, unos brazos me aprisionan y unas piernas entrelazan con las mías, levanto la mirada y me encuentro con la esmeralda viéndome fijamente.
-
Buen día.
Le sonrío y abrazo aún más, pegándome a su cuerpo tanto como me sea posible, una incomodidad en mi entrepierna ante la reacción de estar tan cerca suyo.
-
Extrañe despertar así