C22 Veintidós
"¿Es ese mi teléfono?" preguntó Alexa.
Leo asintió y la ayudó a cogerlo de donde lo había colocado, que es sobre el tocador. Se la entregó.
Los ojos de Leo captaron el identificador de llamadas. Cleo. Parece el nombre de un chico.
"Hola", contestó Alexa mientras Leo miraba fijamente su gran barriga, que resulta ser la raíz de su enfermedad, y se la frotaba.
"Están pasando cosas raras aquí