El Primer amor.../C34 Capítulo 34
+ Add to Library
El Primer amor.../C34 Capítulo 34
+ Add to Library

C34 Capítulo 34

- ¡¡¡Eres un capullo!!!

- Cuanto tiempo sin escuchar tus dulces palabras.

- ¿Qué te pasa? Vienes ahora con escenitas de celos? ¡¡Es lo que me faltaba vamos!!

El camino vamos en silencio, voy directa a la oficina y no vuelvo a cruzar palabra con él.

- Señor Ermida, recuerde que tiene hasta el viernes para entregarme el artículo.

Y sin dejarle contestar retumbo mis tacones hasta la oficina de mi padre.

- ¿Donde está el papi más maravilloso del mundo? - Digo mientras abro la puerta.

Mi padre tiene la cabeza agachada mirando unos papeles, pero enseguida la levanta.

- Mi bichilla. Entra cariño. - Entro cerrando la puerta - El sábado vuelve Mathi con su esposa vamos a cenar todos.

- Te confirmo, porque tendré que hablar con Brais, es el cumpleaños de su hermana pequeña y me ha pedido la niña que deje que Brayana vaya, y si Brais no esta pendiente a su comida, no se como haré.

- Vale, avisame lo más tarde hoy, para hacer la reserva.

- Así lo haré papá, voy a trabajar. Hablamos luego.

Al llegar a mi oficina le digo a mi secretaria que avise a Brais que venga.

Mientras me pongo con mi artículo para dejarlo listo.

- ¿Me llamabas?

Asiento y le indico que se siente.

- Avril me ha dicho que el sábado es su cumpleaños. - El asiente - ¿Va a estar tu amiga?

- No lo sé. - Dice aún enfadado.

- Haber Brais ha pedido que dejara que Brayana vaya, y si la dejo ir tiene que ser porque tu la vas a vigilar, es un cumpleaños habrá mucha comida que ella no puede comer.

- Tu también puedes quedarte.

- El sábado no puedo. - y como al mirarlo veo que se cree otra cosa y no tengo ganas de pelear le aclaro - Llega Mathi y papá quiere que vayamos a cenar, si no vas a estar pendiente a Brayana yo me la llevo a la cena y no va al cumpleaños. Las dos me han rogado para que la deje ir.

- Yo me haré cargo de ella. Es mi hija.

- Brais, no deberíamos pelear por estupideces. Es tu hija lo sé pero no la conoces y tu amiga no pone las cosas del todo fácil.

- Tienes razón Lu, no te preocupes yo me ocuparé de Brayana y después de tu cena te la llevo.

- Gracias.

- Recuerda que la reocojes tu hoy.

Se que aún está enfadado, pero bueno como hemos dicho hay que ser cordiales, y lo somos.

Por la tarde voy al centro comercial a comprar el regalo de Avril y en la jugueteria le encuentro un unicornio gigante y se le compro.

Erick me llama justo cuando estoy guardando en el coche.

- Luana, soy Erick ¿Podemos hablar ahora?

- Hola Erick estoy en el centro comercial, si quieres tomamos un café mientras hablamos.

Mientras espero miro mis email y me sorprendo al ver las solicitudes de los club rechazadas, no me dan motivos simplemente rechazada.

¡Vaya Mierda!

Cuando llega Erick nos sentamos en la cafetería.

- ¿No se pondrá celoso tu marido por tomar un café conmigo no?

- No tengo marido. - digo sonriendo.

- Quería comentarte, la mamá de Izan murió cuando Izan nació, ayer cuando Brayana llegó al colegio se hicieron muy amigos y Izan se lo dijo a la pequeña, entonces ella le ha dicho que seguramente su mamá volvería, porque ella no tenía papá y ahora sí lo tiene. Claro ahora Izan está con que cuando viene su mamá.

Me llevo la mano a la boca, me quedo apenada y avergonzada.

- Erick lo siento mucho, tuve un problema con el papá de Brayana y me fui a Londres, me entere allí que estaba embarazada y nunca se lo conté, acaba de conocer a su padre y su padre a ella y claro son niños. Lo siento está noche hablaré con ella.

- Alfinal te enteraste de lo que te hizo Brais, ¿Por eso te fuiste? - Lo miro buscando una explicación - Cuando tu madre murió, tu te fuiste estuviste unas semanas desaparecida, escuche como se lo decía a tu amiga, que él quería contarte que solo quería estar contigo para que tu padre le dejara hacer sus prácticas en su editorial...

- ¿Lía lo sabía? - lo corto.

- Si, pero déjame terminar.

- Erick, gracias, tengo que recoger a la niña hablamos otro día.

- Pero Luana...

Me voy de allí, estoy tan enfadada, Lía lo sabía, lo sabia desde noviembre y no me lo dijo se quedó callada, era mi mejor amiga, me vio llorando cuando le conté lo que escuche y no me dijo nada.

Llego a mi casa y me meto bajo la ducha, encima me ha bajado la regla.

¡Puta mierda!

Y antes que los dolores acaben conmigo me tomo un paracetamol, me pongo mi pijama calentito y me acuesto en el sillón.

Con la regla se que no puedo hablar con Lía, porque estoy muy cabreada con ella.

Me despierto a las seis de la tarde con el timbre sonando.

- Sí.

- Mamá hemos llegado. - Escucho a mi pequeña feliz.

Abro la puerta, se que tengo cara de pocos amigos por la regla, además del cabreo que tengo con Lía.

Brais al verme la cara me mira preocupado. Abrazo a mi pequeña que es la que me recarga las energías.

- Te hechaba de menos pequeña mía.

- Sabes mamá, hoy te quiero mucho más que ayer.

Y me la como, es que mi pequeña es un amor.

- Te quiero, ve a jugar a la habitación.

Desde que se va Brais me agarra por el brazo.

- ¿Estas bien?

- La regla, no se si recuerdas...

- Lo recuerdo bien. - sonríe.

Entra en mi casa cerrando la puerta.

- Me ocupo hoy de la niña, descansa.

Va al congelador coge un bote de helado de chocolate y me lo da.

- ¿Ha cambiado algo?

- Nadita. - Sonrío mientras recuerdo lo atento que era cuando me bajaba la regla.

- Esta noche pido pizza.

- Brais, hoy quisiera estar tranquila.

- Lo sé, lo recuerdo y no te molestaré, vete y acuéstate. - Dice mientras me levanta del sillón.

Y como está regla me ha atacado fuerte, ya no se si por la regla en si o por el cabreo que tengo, no le discuto, me acuesto en mi cama y me duermo.

Me despierto con un beso, abro los ojos y ahí está mi pequeña preciosa.

- Voy a dormir mamá, ¿Estás mejor?

Asiento, asiento emocionada por lo cariñosa y atenta que es mi pequeña conmigo.

- Brayana, te quiero muchísimo.

- Yo te quiero mucho más que ayer mamá.

Ella se baja de mi cama y se va cerrando la puerta, me quedo pensando en Lía mi amiga de toda la vida, ¿porque me engañó así? Hoy es uno de esos días que enterraría mi cabeza bajo tierra como las avestruces, un día de esos que cogería otra vez ese vuelo destino a Londres para no volver nunca más.

Lloro y se que es por la puñetera regla, porque más que triste estoy enfadada y mucho.

Brais abre la puerta de la habitación y como estoy enfadada le grito.

- ¿No sabes tocar? Tengo derecho a privacidad en mi propia casa.

El pobre me sonríe, ni se inmuta por los gritos que le acabo de pegar.

Sale y toca la puerta despacito.

Me levanto hecha una furia, lo sé, soy lo peor cuando tengo la regla.

- ¿Eres subnormal? O te gusta hacerme enfadar.

Pero Brais no habla, me da la mano y me lleva hasta el salón, donde tiene las luces apagadas y un par de velas encendidas va hasta la radio y pone esa canción que marcó nuestra relación.

Y bailamos, bailamos a la luz de las velas mientras Alex ubago canta que nos morimos por Besarnos.... apoyo mi cabeza en su pecho y lloro, recuerdo que siempre hacía esto cuando me bajaba la regla, recuerdo lo atento y paciente que era conmigo y lo vuelve a hacer.

- ¿Estas bien pequeña?

Pues claro que no, no estoy bien, mi mejor amiga me oculto una mentira tuya muy importante.

Eso piensa mi cabeza pero de mi boca no sale nada, solo lloro.

Empiezo a pensar, y mi cabeza empieza a traicionaron, ¿será que han tenido algo? Claro por eso me lo ocultaron, por eso Lía me decía que lo perdonara, y empiezo a llorar más y más .

- Pequeña, me estás asustando. ¿Qué pasa?

- Te acostabas con Lía, ¿por eso ella me lo quiso ocultar verdad?

Report
Share
Comments
|
Setting
Background
Font
18
Nunito
Merriweather
Libre Baskerville
Gentium Book Basic
Roboto
Rubik
Nunito
Page with
1000
Line-Height