C197 Curación milagrosa
Herzl apenas probó bocado y me aseguró que estaba satisfecho, así que lo metí en la cama. Apenas iba por la mitad de su cuento cuando me di cuenta de que ya estaba profundamente dormido.
Me di una ducha caliente, me vestí con una bata sencilla informal y salí de casa, esta vez era más cómodo llegar al hospital en mi coche