C54 Detrás de mis ojos
Gera estaba sentada al lado de Tomás, el silencio reinaba entre los dos mientras miraban el mar debajo del cielo nubloso, hacía mucho frío, aunque eso parecía no importarles:
—Yo en un tiempo fui drogadicto, solo por unos meses, llegué a irme de la casa y casi muero en ese tiempo —llevó su mirada a Gera—, viví en ese barrio por unas cuantas semanas