C15 Tarde con ellos
—¡Paulina! ¡Paulina! Vamos, levántate —me dice la voz que reconozco como la de Miguel mientras me estremece— Tenemos que irnos pronto y tú todavía no te has arreglado.
—Ya voy, ya voy —digo más dormida que despierta— Dame cinco minutos ¿Sí?
—Ni te creas que caeré en ese juego —dice sin dejar de estremecerme— Eso mismo me dijo Ismael, Estiben y Pablo hace más de media hora y no se han levantado