C93 Volver a casa
AL DÍA SIGUIENTE, los rayos del sol de primera hora de la mañana se colaban por la ventana y llegaban hasta la cara de Vidya, que estaba tumbada descuidadamente en la cama. Un hermoso pájaro azul se posó en las rejillas de la ventana y gorjeó ruidosamente, picoteando su reflejo en la ventana.
Todo esto combinado, hizo que Vidya finalmente bostezara, y luego abriera su ojo izquierdo