C10 CAPÍTULO DIEZ
"No te subas los pantalones cuando termines", me quedé paralizado al escuchar una voz profunda y masculina. "¿Quién demonios está aquí?", exclamé con un grito ahogado, y quienquiera que fuera soltó una risita. "Hay otra persona aquí, ¿acaso no escuchaste lo que te pedí?", volvió a decir la voz. "Debe ser alguna niña haciéndome una broma", pensé, encogiéndome de hombros.
Afortunadamente