C36 Capítulo 36
Un trago forzado pasó por la garganta de Kader cuando evidenció que los labios de Nadia se abrieron y sus ojos se cerraron de golpe. Y justo cuando su entrepierna no pudo más con la situación, sus dedos sostuvieron su mandíbula en un agarre fuerte.
—¿Qué haces aquí? —el tono frío de sus palabras solo le indicaron a Nadia que ese momento mágico se había pulverizado