C20 Cara valiente
Mia no luchó más. Se detuvo al llegar a la puerta del palacio y supo que había vuelto. Sabía que aquí moriría. Ya no tenía fuerzas para luchar, así que dejó que la llevaran dentro. La llevaron por el silencioso pasillo que conducía a su habitación y luego a sus aposentos. Los dos guardias la tenían atrapada entre ellos para que no escapara. No se fiaban de ella y no les culpaba