C85 El consejo de papá
Al día siguiente, Carol se despertó un poco mejor que el día anterior, pero con un aspecto horrible. Tenía los ojos hinchados de lágrimas derramadas y no derramadas y no tenía apetito. Para su sorpresa, Sebastian seguía en casa, aunque eran casi las ocho cuando se despertó.
"Quería asegurarme de que estabas bien antes de irme". Le informó cuando ella le preguntó por qué seguía por allí