C7 Reales

Los lobos que estaban con el Alpha y la Luna hace unos minutos ahora se dirigen hacia nosotros. Ya sabía que los licántropos son criaturas de una belleza innata, pero créanme, estos dos que se acercan son los más deslumbrantes que he visto hasta la fecha. No tengo idea de quiénes son, pero la energía que emanan de sus cuerpos es palpable, lo que indica que deben ocupar posiciones de alto rango en sus manadas. Se acercaron y se detuvieron frente a Layla y Matt.

La loba frente a Matt tiene mi misma estatura, cabello castaño rojizo que le llega a los hombros y ojos verdes. Lo examinó sin disimulo y soltó un silbido. "¿No te lo dije? Ellon, mi pareja, iba a ser el macho más atractivo del planeta", le dijo al hombre que observaba a Layla sin parpadear.

Layla se mofó de su comentario. "¿Acaso no has oído hablar del lazo de pareja y la atracción entre almas gemelas?" le espetó, sin apartar la mirada del hombre frente a ella. Él, de impresionante estatura de 6 pies, lucía un cabello castaño perfectamente arreglado y ojos azules. Al escuchar a Layla, el hombre sonrió y negó con la cabeza... "Y yo te dije, mia, que mi pareja sería sin duda la reina del sarcasmo", le respondió, y ante sus palabras, Layla se sonrojó intensamente... {así es como se conoce a tu pareja por primera vez...}

La tal Mia rodó los ojos y volvió a fijar su atención en Matt. "¿Cómo te llamas, guapo?" le preguntó. Matt seguía observándola, tomando respiraciones profundas... {seguramente captando su esencia}... Yo estaba parada entre Layla y Matt, así que le di un codazo a él. De repente, Mia gruñó, me apartó de un empujón y se colocó entre Matt y yo. Alcé las manos en señal de rendición. ¿Cómo olvidar que los compañeros pueden ser extremadamente posesivos hasta que se marcan? Matt me miró con pánico mientras su pareja me fulminaba con la mirada.

"Contrólala, idiota", le espetó Layla, y él abrió los ojos como platos. "¡Vamos, que es tu pareja, por el amor de Dios!", le reprochó con irritación. Matt posó su mano sobre la de ella con cautela, y el vínculo de pareja desató su magia al instante. Mia se volvió hacia él, lo abrazó con fuerza e inhaló su aroma. Traté de contener la risa, pero cuando Layla comenzó a reír, no pude resistirme y me uní a ella.

Matt estaba con los ojos desorbitados, la boca abierta y las manos suspendidas en el aire; si te fijabas bien, hasta parecía haber dejado de respirar por la conmoción. Cuando Mia se apartó, él por fin recobró el aliento y respiró hondo. Finalmente, contuve mi risa, pero Layla seguía carcajeándose, y los ojos de su compañero no se despegaban de ella, mientras en su rostro se dibujaba una sonrisa tenue... {ya estaba completamente cautivado... y no es para menos, ambas son increíbles}

Matt se rascó la nuca con torpeza... "Soy Matt, Matt Walker", se presentó a Mia, y ella le regaló una sonrisa que le quitaba el aliento.

"Hola, Matt, soy Mia Williams", le dijo ella, y él asintió, aún sonrojado por el abrazo que había recibido.

"Ellon Wood", se presentó el compañero de Layla extendiéndole la mano. Ella la aceptó sin vacilar.

"Layla Black", se presentó ella, y él besó el dorso de su mano, provocando que sus mejillas se tiñeran de un rojo intenso. Era evidente que no quería soltar su mano, pero a pesar de su deseo, la soltó. Justo cuando terminaron las presentaciones, alguien carraspeó y todos dirigimos la mirada hacia la fuente del sonido. El Alfa Aiden se encontraba ahora frente a nosotros.

"Me complace que hayáis encontrado a vuestras parejas, pero debemos hacer un anuncio", les dijo a Mia y Ellon.

"Por supuesto, Alfa", respondió Mia con seguridad. Tomó la mano de Matt y juntos se dirigieron al frente.

"Me gustaría que me acompañaras", le dijo Ellon a Layla, y era obvio por su expresión que deseaba volver a tomar su mano. Layla me miró y luego al Alfa. Sabía que quería ir con su compañero, pero aún así, pensaba en mí. El Alfa le lanzó una mirada significativa, indicándole que no me pidiera ir al frente...{él nunca querría que yo estuviera al frente}... Ella suspiró profundamente y estaba a punto de hablar cuando la interrumpí.

"Sí, ella irá contigo", dije por ella, y en ese momento, la mirada de Ellon se desvió de Layla hacia mí. Una expresión de sorpresa se dibujó en su rostro, pero la ocultó rápidamente. Podría haberlo comentado, pero ya estoy acostumbrada a estas situaciones. No es tan común que los humanos convivan con hombres lobo. Le sonreí y él me devolvió el gesto con rigidez.

"Ven, Beta Ellon"... {así que es un Beta}... dijo Alfa Aiden, y Ellon le ofreció su mano a Layla. Ella me miró indecisa, pero ante mi gesto de ánimo, soltó un bufido y finalmente colocó su mano en la de él, y los tres se adelantaron.

El Alfa Aiden tomó la palabra: "Manada Luna Azul, el reciente ataque que sufrimos no fue un simple ataque de renegados. Lamentablemente, los vampiros también colaboraron con ellos". La Manada Luna Azul cuenta exactamente con 357 hombres lobo, y si me incluyen a mí, somos 358 miembros, todos presentes aquí, y aún así, reina un silencio absoluto. "Nos atacaron 50 renegados, pero desconocemos el número exacto de vampiros. Todos sabemos que los ataques de vampiros son poco frecuentes, por lo que informamos de este ataque a la manada real 'Luna Creciente', y dado que logramos matar a un vampiro, tenemos pruebas suficientes de que fuimos atacados. Ante la gravedad de la situación, el Rey Alfa ha enviado a su Beta, Ellon Wood, y a su Gamma, Mia Williams, para investigar el asunto."... {joder, Beta Layla Black y Gamma Matt Walker. Suena increíblemente genial.}

"Permanecerán en nuestra manada durante unos días, por lo que si alguno de ustedes tiene información que considere útil acerca de esta situación, puede comunicársela al beta y al gamma de la manada de la luna creciente. Mientras estén aquí, colaborarán con el gamma Alexander y Leah en el entrenamiento de nuestra manada y en enseñar habilidades que nos ayudarán a defendernos de cualquier ataque vampírico." Explicó y nos dio un momento para asimilar la noticia antes de continuar... "Además, me complace anunciar que hemos obtenido el permiso para organizar el 'baile de la pareja' este año en nuestra manada. Por ello, les solicito que pospongan cualquier plan que tengan para los próximos tres meses que requiera salir de la manada por algún motivo o trabajo, ya que tenemos mucho que preparar. Si alguien tiene casos de emergencia que resolver, les pido que vengan a solicitar mi autorización en persona. Gracias por su atención. Que tengan un buen día." Con estas palabras, el alfa Aiden concluyó la reunión de la manada e indicó a todos que retomaran sus labores. Se acercó a Ellon y Mia y comenzaron a conversar mientras Layla y Matt permanecían de pie, buscándome entre la multitud. Observé a mi alrededor y noté que la mayoría ya se había dispersado, así que me dirigí hacia la casa de la manada cuando una voz me detuvo.

"Ay, nuestra rarita perdió a sus mejores amigos", ya sabía que era Stella... {a pesar de su actitud desagradable, nunca la odié, pero tras el rechazo de Ethan, no podía ignorar el resentimiento que sentía hacia ella}... Cerré los puños para contenerme, porque a pesar de mis esfuerzos por mantener la calma, este lazo de pareja 'roto' estaba alterando mis emociones. Cerré los ojos y comencé a contar hacia atrás para calmar mi enojo. "Ay, lloriquear no cambiará la realidad, 'addy'", se mofó, y sus amigas soltaron carcajadas. "Los compañeros de Matt y Layla son lobos de rango más alto que ellos, así que tendrán que cambiar de manada y mudarse con ellos, y por fin podrán librarse de ti." Aunque tenía los ojos cerrados, sus palabras me laceraban el corazón. Los abrí y vi a los demás riéndose mientras Stella me miraba con suficiencia.

"Stella, sabes que puedo darte una respuesta a la altura", le dije con un tono sereno, y de repente todos enmudecieron... "y ahora, después de haber matado a un vampiro y a un hombre lobo, no creo que me resulte muy difícil matar o quizás herir gravemente a otro", hice una pausa y observé sus expresiones de asombro... {nunca antes les había plantado cara}... "pero eres la futura luna de esta manada y, como miembro de la misma, me he prohibido causar daño a sus integrantes", añadí con voz gélida. Esperaba una réplica de su parte cuando escuché un gruñido detrás de mí, y de nuevo, ya sabía quién era... {¿Cómo diablos podía reconocer el gruñido de Ethan? ...maldito lazo de pareja}... Se plantó frente a mí, al lado de Stella, y esa imagen volvió a hacer hervir mi sangre. Solo deseaba hacer pedazos a esa Stella.

Ethan luce enfadado, pero por su respiración entrecortada, ya sé que está luchando por mantener el control. Escuché pasos apresurados acercándose, así que giré la cabeza y vi a Layla y Matt detenerse frente a mí, clavando la mirada en los demás.

"¿Qué han hecho esta vez?" preguntó Layla con una mirada fulminante hacia ellos. Mia y Ellon también se nos unieron. Mientras Mia no parece muy contenta, Ellon simplemente observa a todos con detenimiento.

"No ha pasado nada..." intentaba apaciguar a Layla cuando Stella decidió que era el momento oportuno para soltar veneno por su boca.

"Pensé que abandonarías tu labor de rescate al encontrar pareja, Layla", le espetó, demostrando que su cabeza estaba más vacía que un tambor... {¿quién demonios en su sano juicio le dice eso a una loba delante de su pareja, y no una cualquiera, sino un miembro de la realeza?}... "Tus padres quizás no te lo hayan dicho, pero dudo que a un beta real le agrade que su compañera sea amiga de una simple humana como ella, ¿o sí?" Dicho esto, Stella evaluó a Ellon de arriba abajo. Layla gruñó y se abalanzó sobre el cuello de Stella; antes de que pudiera hacer más, Ellon se interpuso, atrayendo su rostro hacia el hueco de su cuello y acariciando su espalda, mientras Ethan apartaba la mano de Layla del cuello de Stella... {confirmado, Stella es increíblemente tonta...}

"Calma, mi niña, solo soy tuyo", le susurró Ellon a Layla, que tomaba profundas respiraciones, apaciguada por su aroma. Ellon me miró y preguntó, "¿Podemos ir a otro lugar?" Asentí con la cabeza. Nos dirigimos al borde del bosque y, durante todo el camino, sentí la mirada de Ethan sobre mí... {si de verdad quisiera que el lazo de pareja se disolviera, debería mantener su distancia y no interponerse en mi camino. No es que fuera a hacerle daño a su novia.}

"Ustedes pueden ir al lago", les sugerí a los cuatro.

"¿Y tú por qué no vienes?" inquirió Matt, mientras Mia me lanzaba una mirada de desaprobación... {alguien debería dejarle claro que Matt no me interesa en lo más mínimo.}

"Tengo asuntos pendientes", les respondí, y Layla me miró con recelo. "Debo encontrarme con el Gamma Alexander", Matt me lanzó una mirada significativa y noté a Mia cada vez más inquieta. Rodé los ojos, pero no podía pasar por alto su actitud. No estaba dispuesta a soportar a otra loba de rango respirándome en la nuca... "No te confundas, Mia, somos amigos y nada más. Él se preocupa por mí porque, como bien ves, soy una humana viviendo entre lobos, y eso me expone a accidentes peligrosos con facilidad", traté de explicarle.

"¿A qué te refieres con 'se preocupa'? ¿Estás insinuando que a mí no me importa?" replicó Layla, cruzándose de brazos, y en esta ocasión Ellon me dirigió una mirada de desagrado. Volví a rodar los ojos ante estos compañeros tan estúpidamente posesivos... {aunque he de admitir que tiene su encanto.}

"Por Dios, chicos, encontrasteis a vuestras medias naranjas hace apenas una hora y aún así seguís pegados a mí", les dije con énfasis. "Deberíais olvidaros de aquel trío...". Los provoqué y tanto Mia como Ellon gruñeron, mientras Layla y Matt intentaban calmarlos lanzándome miradas fulminantes. "...planes", concluí entre risas, observando cómo luchaban por contener a sus parejas. {Qué divertido}.

"¿Qué insinúas, zorra?" exclamaron Matt y Layla al unísono, intentando sujetar a sus parejas, lo que me provocó una carcajada aún mayor.

"Es que es tan divertido picar a las parejas ultra posesivas", les expliqué, mientras seguían mirándome con ojos de pocos amigos.

"Que la Diosa de la Luna te conceda la pareja más posesiva del mundo entero", exclamó Layla, y en cuanto las palabras salieron de su boca, sus ojos se abrieron como platos y Matt la miró con asombro.

"La Diosa Luna me quiere mucho; por eso mi pareja me rechazó en el acto, Layla", le dije manteniendo el tono juguetón para no hacerla sentir mal, aunque en el fondo, esas palabras resonaban dolorosamente en mi corazón.

Al oírme, Mia y Ellon se quedaron paralizados, mirándome boquiabiertos. Me reí de sus caras, pero el resto guardó un silencio sepulcral, excepto yo. "Tranquilos, chicos, id y disfrutad el uno del otro", les insté a los cuatro, pero ahora todos me miraban con recelo. "Cuando acepté el rechazo, acepté todo lo que conllevaba". Layla y Matt asintieron, pero Mia y Ellon parecían no estar del todo convencidos. "Soy mucho más de lo que aparento, altezas, no os preocupéis por mí... id a pasar un buen rato con vuestras parejas", les animé y me dirigí hacia la casa de la manada. Al llegar a mi habitación y abrir la puerta, me encontré de frente con Ethan... {debe tener una muy buena razón para estar aquí ahora, o lo echaré de mi habitación sin pensarlo dos veces}.

"¿Qué haces en mi habitación?" le pregunté, sin mostrar ninguna emoción. Se acercó y cerró la puerta tras de sí... {Claro, no puede permitir que nadie escuche nuestra conversación, y aunque todas las habitaciones de la casa de la manada sean insonorizadas, hay que cerrar la puerta}.

"No se supone que le digas a nadie que YO soy tu pareja", me espetó con un gruñido, y a pesar de su enfado, pude percibir un atisbo de ternura en su mirada.

"¿Y a quién le he dicho que ERAS mi pareja?" le repliqué, corrigiéndole con precisión, y él gruñó.

"No intentes ser astuta, Aadhya. Te escuché contárselo a esos lobos de la realeza", avanzó un paso hacia mí y retrocedí instintivamente. Eso pareció molestarle, pues sus ojos oscilaban entre el marrón y el negro.

"Les dije que MI pareja me había rechazado. Nunca mencioné tu nombre, ¿no es así?" le reté con firmeza.

"No te creo", afirmó, y eso solo consiguió dibujarme una sonrisa en el rostro.

"Entonces no lo hagas", le dije, y él me miró con irritación. "No espero nada de ti, ni siquiera tu creencia, y espero que tú tampoco esperes nada de mí... Tampoco tengo nada que ofrecerte", le dije, esbozando una sonrisa triste. "No puedo negar que no te desee, porque el lazo de compañeros escapa a mi control, pero puedo asegurarte algo con toda certeza", le dije con firmeza. "Jamás me permitiré aceptarte como mi compañero". Podía ver en su rostro que mis palabras lo golpearon con fuerza, realmente fuerte. "Y no te preocupes por si alguien descubre que soy tu compañera. No quiero que mi nombre se asocie al tuyo. Cuanto más intente forzarme este lazo, más repulsión sentiré hacia ti". Eso fue el colmo para él.

Gruñó con fuerza y me empujó contra la pared, presionando su cuerpo contra el mío. Las chispas habituales recorrieron mi cuerpo debido a su contacto, pero ya no eran tan intensas como antes. No sé qué me impulsó, pero tan rápido como me había empujado contra la pared, con la misma velocidad reaccioné. Tomé su mano derecha de mi hombro y, con un movimiento ágil, le torcí el brazo a la espalda con toda mi fuerza. Gritó de dolor y escuché el crujido de un hueso rompiéndose. Ese sonido fue suficiente para hacerme volver en sí. Cuando mi mente por fin procesó lo que había hecho, solté su mano con un jadeo y retrocedí unos pasos... {¿Acaso he vencido a un lobo alfa? ¿Podría este día ser un poco menos aventurero?}

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NOTA DE LA AUTORA -.

Hola a todos, antes que nada, gracias por leer esta historia. Me encantaría conocer vuestras impresiones sobre este libro, 'El Raro de la Manada: Un Misterio por Desvelar'. Sería maravilloso si pudierais dedicar unos minutos de vuestro tiempo para publicar algunos comentarios o reseñas. Realmente sería un gran estímulo para mí seguir escribiendo.

Gracias