C76 ROMPIÉNDOME POR TODAS PARTES.
MEREDITH:
Las preguntas, los disparos de las cámaras y la tensión incesante hicieron que necesitara un poco de aire fresco. Por si fuera poco, me dolía el estómago, que rugía sin piedad. Quizá me había comido algo, o eran las secuelas de la ansiedad. Necesitaba intimidad para recuperar el aliento y expulsar los peligrosos gases provocados por este caos. Lo sé, las chicas guapas no se tiran pedos