C25 El cielo mismo II
Se abraza a mi cadera y no puedo ni respirar. Quiero decirle que en realidad soy yo quien lo arrastró a esta maraña de secretos que se hace más grande cada vez. Necesito decirle que todo lo que ha pasado, lo bueno y lo malo ha sido por mi causa y de nadie más. Que no tiene que pedir disculpas porque soy la única culpable de este embrollo