C37 Capítulo 35
Mi respiración se aceleró notablemente, frote mis ojos y volví a fijar mi vista en el árbol.
—no puede ser —susurre para mi misma.
Ya no había nada, podría jurar que había una persona ahí, entre las ramas, calmate Jane estas alterada eso es todo me digo a mi misma.
—el muy perezoso sigue durmiendo —Nicole entra enojada ala habitación y frunce el ceño al verme