C125 CAPÍTULO 125 No Soy Gentil Ni Considerado
A Nolan casi se le sale el corazón por la garganta, le temblaba la mano y casi se le cae el teléfono.
"¡Oh! No es Broderick Alessandro", dijo, "el coche deportivo que acabo de ver era como el de Broderick Alessandro".
Nolan dio un suspiro de alivio y colgó la llamada, fue en ese momento cuando se abrió la puerta.
Se quedó atónito al ver a un hombre extraño ante él.
"Hola", saludó Nolan