Mis Dos Chicos/C2 2. Promesa rota
+ Add to Library
Mis Dos Chicos/C2 2. Promesa rota
+ Add to Library

C2 2. Promesa rota

—Te ves hermosa, ¿dónde irás? —mi mamá se sentó en mi cama mientras miraba mi atuendo.

—Iremos de fiesta con las chicas —contesté mientras me miraba en el espejo—. ¿No crees que me veo muy ancha con este vestido?

—Te ves increíble, Zoë —bufó. Se paró de la cama y se acercó a mí-.Tú sabes qué tienes que hacer hija, avísanos cuando llegues allá.

—Si mamá, te avisaré —asentí con una sonrisa—. Creo que me quedaré en la casa de Anne, así que ahí te confirmo —besé su mejilla.

Después de unos minutos ya estaba completamente lista. Ahora sólo estaba esperando que llegara el uber con las chicas.

Decidí ponerme un vestido azul eléctrico bastante ceñido al cuerpo que me llegaba unos cinco dedos más abajo de las pompas, lo combiné con unos tacones negros que me hacían lucir bastante alta, una chaqueta de cuero color negra y un pequeño bolso para guardar mi celular, dinero y lo necesario para retocar mi maquillaje.

"Zoë, promete que no te vas a besar con ningún chico esta noche".

Eso es lo que pienso cada vez que me voy de fiestas, ¿que si lo cumplo? Digamos que no mucho, pero lo intento.

—¡Zoë, el Uber ya está afuera! —papá gritó desde abajo. Tomé mi bolso y bajé de inmediato.

Me despedí sólo de mis padres ya que mi hermana Agustina pasa la mayor parte del tiempo donde su novio. Ella tiene veinte años, es tres años mayor que yo pero a veces pienso que yo soy la hermana grande. La amo, pero me estresa que constantemente llegue a la casa llorando como Maria Magdalena porque peleó con su novio tóxico, y ahí tengo que estar yo, consolándola por tres horas o más.

Lo peor es que a pesar de que ella tiene clarísimo que la relación que tienen no es sana, no es capaz de terminar con él. El "amor" o más bien obsesión la tiene destruida, pero no lo admite.

Me subí al auto y saludé a las chicas.

Anne tiene el pelo rubio, y un cuerpo de infarto. Es hermosa, y la más introvertida de las tres.

Kat es un poco más alta que yo, tiene una cara preciosa y el cabello café. Ella se parece un poco más a mí, es exagerada, loca, coqueta y dramática.

Muchas veces Anne parece nuestra madre, es la más centrada del grupo y la más madura.

—¿Qué pensaste antes de salir de tu casa, Zoë? —Kat preguntó. Anne me miró con una ceja alzada y sonrió.

—No me voy a besar con nadie esta noche —bufé riendo.

—¿Y lo harás? —Kat rió.

—Esperemos que sí.

Llegamos a la casa de Hernán, el chico que me invitó a su fiesta. No me acuerdo de dónde lo conozco, pero me llegó un mensaje a Whatsapp de su invitación y claramente acepté.

Le mandé un mensaje a mi mamá avisándole que ya habíamos llegado y guardé mi celular en el bolso. Al entrar a la casa, sentí un fuerte olor a drogas y alcohol. Miré a Anne y reí al ver su cara de disgusto.

—No sé si me agrada estar acá —dijo Anne en voz alta.

—Estoy segura de que después cambiarás de opinión —sonreí guiñándole el ojo.

Habían muchas personas bailando, otros sentados conversando mientras bebían y algunos en la piscina.

Nos acercamos hacia la mesa donde estaban las botellas de whisky, ron, cerveza, vodka y muchos otros más. Nos servimos algo de beber en unos vasos rojos de plástico y caminamos hacia donde todos estaban bailando.

La canción No me conoce de Jhay Cortez comenzó a sonar. Esta canción si que me gusta.

Comenzamos a bailar mientras tomábamos de nuestro vaso.

—¿Él es Hernán? —Anne apuntó disimuladamente. Miré hacia donde me indicaba y vi a un chico que tenía puesta su mirada en mí. Se me hace cara familiar.

—Supongo que si —me encogí de hombros.

—¿Quieren bailar? —miré hacia atrás y vi a tres chicos totalmente desconocidos y lamentablemente guapísimos. Miré a uno en especial, tenía los ojos verdes y el cabello oscuro. Era hermoso de verdad.

—No sé ustedes, pero yo sí —miré a las chicas y sonreí. Me acerqué al Dios griego y tomé su mano para alejarnos un poco del grupo —¿Cómo te llamas?

—Dime Russ.

Mordí mi labio inferior al escuchar su voz.

Mamá, si no me sacas de acá no cumpliré eso de no besarme con nadie

Comencé a moverme al ritmo de la música de una forma provocativa mientras él me miraba coqueto.

Me debo ver muy ridícula actuando así...

Me di vuelta y pegué mi espalda a su torso, puso sus manos en mi cintura y comencé a moverme.

—No me hagas esto —susurró en mi oreja.

—¿Hacerte qué? —pregunté con un tono angelical mientras movía mi trasero levemente.

—Moverte así —su voz sonaba ronca. Después de unos minutos sentí algo duro en mi trasero. Alcé la ceja y me di vuelta para mirarlo a la cara.

—¿Qué pasó, Russ?

—Conste que yo te dije que no te movieras así —gruñó. Puse mis manos en su cuello mientras seguía bailando. Estaba sólo a unos centímetros de su boca.

—Prometí que no me iba a besar con nadie esta noche —murmuré haciendo un puchero.

—¿Y no te dan ganas de romper esa promesa?

—Sí, pero no debo hacerlo. Soy una niña buena, tengo que cumplir lo que digo —respondí.

—¿Y si te beso yo a ti? —me acercó más a su cuerpo, lo que hizo que sintiera aún más a su amigo.

—Me voy a enojar, me voy a enojar un montón —mi voz no sonaba para nada convincente.

Sin esperar más, acercó sus labios a los míos, y será, tendré que seguirle el beso. Sonreí mientras nos besábamos, mordió mi labio inferior y yo copié su acción.

Otra vez no cumplí mi promesa

Report
Share
Comments
|
Setting
Background
Font
18
Nunito
Merriweather
Libre Baskerville
Gentium Book Basic
Roboto
Rubik
Nunito
Page with
1000
Line-Height