C127 Sexo bondage (I)
Adonis
Por alguna razón, mi humor era tan brillante como las nubes oscuras en medio de una tormenta eléctrica mientras empujaba la puerta para abrirla, planeando ya subir las escaleras, coger mi puto equipo de gimnasia y llegar al gimnasio para golpear algún saco de boxeo desafortunado hasta que mis puños estén enrojecidos y doloridos