C2 "Por favor, déjame".

Las afiladas cejas del hombre escondían su mirada, que sobre su nariz era tan profunda como la pupila de los ojos de un lobo, y sus apretados labios parecían cortados por un cuchillo. Sin embargo, sentado en la silla de ruedas que era su mundo, sentía una gran depresión .

"¿Shen Yue?"

Shen Qi, tras quedarse congelada durante dos segundos, se incorporó rápidamente para sentarse en la cama, y poder mirar de soslayo al hombre abrumado.

Shen Qi negó con nerviosismo.

Había reemplazado a Shen Yue para casarse con la familia Ye, pero, por supuesto, no se atrevió a revelar su identidad.

"Oh". los ojos de Ye Moxuan se tornaron un poco más fríos, y sacando un sobre de su bolsillo lo arrojó frente a Shen Qi, que tomándolo en sus manos lo abrió cuidadosamente. Al echar un vistazo en su interior, encontró fotos y diversos materiales de su hermana Shen Yue.

Sin duda había recopilado información sobre la persona con la iba a contraer matrimonio.

Pero, ¿por qué no dijo nada antes de la boda?

Shen Qi apretó con fuerza el sobre que tenía en sus manos, se mordió involuntariamente el labio inferior, y con unos ojos como de vidrio negro miró a Ye Moshen profundamente y en silencio.

"La familia Shen pensó que puesto que Ye Moshen sufría una grave enfermedad en las piernas, ¿no sería la persona más adecuada a la que poder engañar?"

Shen Qi susurró en voz baja: "Yo también soy hija de la familia Shen".

"¿La hija divorciada? ¿La familia Shen supuso que la familia Ye es una papelera de reciclaje?" Los ojos de Ye Moxuan se tornaban cada vez más fríos.

Las palabras satíricas y directas que escuchó Shen Qi, hicieron que volviese a su memoria la noche de pesadilla que vivió hace un mes; de nuevo mordió fuertemente su labio inferior, intentando que el dolor que sentía la alejase de ese recuerdo tan doloroso...

Tras recuperar la tranquilidad, la fría voz del hombre se estrelló de nuevo en sus oídos como un jarro de agua fría: "Te doy cinco minutos, sal de la casa de la familia Ye".

"¿Cómo?" Shen Qi levantó la vista en busca de los negros ojos del hombre.

Su expulsión de la casa de la familia Ye supondría una grave ofensa para la familia Shen. Todos los familiares habían puesto sus esperanzas en ella, y no podía ser la causa de su desilusión y su ruina aunque estuviese dispuesta a marcharse.

Shen Qi recobró el suficiente coraje para mirarle directamente cuando escuchó: "Sé que este es un matrimonio al que te han obligado tus padres. A ti te daría lo mismo cualquier esposo, de lo contrario no habrías aceptado este paripé".

"En lugar de casarte de nuevo, déjame quedarme, prometo que haré todo lo posible para que no te arrepientas".

Diciendo esto, Shen Qi levantó las manos para reafirmar la sincera expresión que dibujó en su rostro, pero no pudo evitar sentirse cautelosa, ante el temor de que él no aceptara su proposición.

Esta apariencia..

Ye Moxuan la miró entrecerrando sus párpados.

Los delgados labios de Ye Moxuan se movieron para preguntar: "Entonces, ¿quieres quedarte?"

Al observar su expresión sonriente, el corazón de Shen Qi tuvo una especie de corazonada siniestra, pero asintió con rapidez.

Ye Moxuan dibujo una mueca desdeñosa en su boca, esta mujer había reemplazado a su hermana para casarse con la familia Ye en busca de prosperidad y riqueza, no sería la primera vez que esto sucede.

Mirando fijamente a su esposa sentada en la cama, abrió sus labios con suavidad: "De acuerdo, te doy la oportunidad de quedarte".

Los ojos de Shen Qi, que se habían cubierto de una luz radiante plena de alegría, se oscurecieron de golpe cuando el hombre al que consideraba un diablo añadió: "Siempre que puedas complacerme".

Shen Qi sintió que la habitación se derrumbaba sobre ella cuando notó, aturdida, como el hombre miraba hacia la cama.

"¿Por qué no eres capaz de entender mi desazón?"

Ye Moxuan sonrió socarronamente: "No me digas, una mujer que ha estado casada durante dos años, y que no sabe cómo complacer a los hombres".

Al escucharle, Shen Qi apretó enérgicamente los puños.

Su matrimonio con Lin Jiang había durado efectivamente dos años, pero durante este tiempo siempre buscó una excusa para no tocarla. Hasta que una noche del último mes, lo comprendió todo cuando vio juntos a Lin Jiang y una encantadora mujer embarazada..

La pesadilla comenzó a partir de ese momento...

"¡Habla!" Su silencio parecía haber provocado que Ye Moxuan perdiese la paciencia, ¡su mano se movió como un zarpazo para despojarla de la colcha con la que cubría su desnudez!

"¡Ah!"