C57 Sin duda lo es
Roxanne sólo podía maldecir el ruido tanto dentro como fuera del palacio por su incapacidad para dormir por la noche. El inquietante silencio del día, cuando llegaron, contrastaba con la algarabía de la noche. Era casi como si todos durmieran durante el día y realizaran sus actividades cotidianas por la noche, como animales nocturnos. Y a Roxanne le resultaba sumamente extraño y muy desagradable