C14 Mi marido me folló a mí y a una chica (Parte 2)
"Abre tus piernas para mí, muéstrame lo que tienes", me instruyó.
Sin dudarlo, me abrí tanto como pude. Ella se arrodilló y me observó atentamente. Sus manos reposaron en mis muslos y se deslizaron con coquetería hacia mi entrada.
"Qué mojada estás. Puedo ver cómo rezuma tu excitación", susurró con voz suave