C30 Capítulo 30
Estoy con la mente completamente perdida, viendo a un punto fijo en mi habitación, con las lágrimas descendiendo por mis mejillas y una culpabilidad tan fuerte que logra que una sensación en la boca de mi estómago se asiente con fuerza. No he podido conciliar el sueño, no desde que presencie hace unas horas lo de Illán, se suponía que iba a disculparme con él, a llevar la fiesta en paz