C39 Capítulo 39
La profundidad de sus besos logra que el corazón me lata tanto, que me desestabilice y me quede en blanco. Sus manos abiertas rozando mis espaldas, sube y se encarga del broche de mi brasier, este cae al suelo y al vernos fijo, sonreímos. Me encargo de quitar su camisa de vestir y al ver su torso bien trabajado, acaricio y dejo algunos besos en sus hombros. Me presiona más a él, rodeo sus hombros