C45 Capítulo 44
–Lucia... Lucia... ¡Lucia! –reacciono y siento mis manos pegajosas.
– ¿Eh? ¿Si? –observo mi mano llena de dulce de leche.
–Se supone que eso va en la malteada, no en tu mano, ¿no? –le miro a la persona a mi lado. –Es tu primer día de trabajo, concéntrate.
–Mile... lo siento, es mejor que limpie las copas y vasos ¿no crees? Antes de cometer un desastre acá –la chica a mi lado, de nombre Milena