C33 Pedirás más
Aisha se sobresaltó, tenía su cara a escasos centímetros de la de Ahmed.
—Lo siento yo….
El árabe no le permitió terminar la oración, la jaló hacía él y le dio un apasionado beso, ella se retiró pues necesitaba respirar, Ahmed frunció el ceño, pensó que quizá no le había gustado el beso.
—Te pido una disculpa, no pensé que te molestará -después de decir eso salió de la habitación