C14 Capítulo 14
Cuatro horas de viaje habían sido fulminantes, en Jinotega el sol estaba oculto, la neblina en las montañas era una completa belleza, eran ya las cinco de la tarde, Marcelo estaba ahí con su tez amarga, era un hombre muy ansioso aunque era un tipo bastante entregado en su profesión, había conocido a Gustavo desde que su mejor amiga Laura se lo presentó como el hombre perfecto, desde entonces