C48 Café, Donut y un poco de Lana
Se sentía igual de bien mientras caminaba por el pasillo, sonriendo y saludando con la cabeza a todo el que se cruzaba, incluso a algunos de los ejecutivos que no le caían demasiado bien. Su estado de ánimo era demasiado bueno como para que nada ni nadie pudiera arruinarlo. Acababa de pasar lo que él llamaría el mejor fin de semana de su vida