C43 Enamorada de mi captor
Daciana durmió durante siete largas horas, cuando se despertó ya era de noche.
Volvió a sentirse un poco viva cuando el dolor remitió, tal y como le había dicho antes el rey Alfa.
Se sentó en la cama y miró alrededor de la habitación vacía. No había ningún Alpha Connor en la habitación. Sus ojos se dirigieron a sus muslos y soltó un profundo suspiro, no de dolor sino de alivio