C4 Capitulo 4 Ayden

No entiendo porque dice eso, no quiere escucharme, sale por la puerta, reconoce esta casa, va directa a los portones, sé que ella también soñó con esta casa, se sabe la dirección, se sabe mi nombre, porque dice que no me merece.

- Adiós Ayden, gracias por no dejarme sola a noche.

Es lo ultimo que me dice y sale, veo como su amiga la está esperando ella se monta en su coche, pero vuelve a mirarme.

Diez minutos después de ella irse me doy cuenta que se ha dejado su móvil y se ha llevado el mío. Cojo el fijo de casa y llamo a mi teléfono.

- Me acabo de dar cuenta que me he traído tu móvil, pero Alex no me puede llevar a devolvértelo.

Solo escuchar su voz hace que sonría, aunque ella habla con mucha timidez es su misma voz, pero está más tímida que lo que yo recordaba en mi sueño.

- Te lo acerco a donde me digas, es que necesito mi móvil.

- Chloe también existe, la foto de la niña de tu móvil, la reconozco es Chloe.

- Si, si Chloe también existe, podemos hablar si quieres.

Y cuando me da la dirección de su casa, mi corazón salta de felicidad. Podré hablar con ella, podré volver a estar cerca de ella.

Cuando llego a su calle y aparco, estoy sonriendo como un tonto, toco el timbre de su casa y ella contesta con esa voz tan tímida que tiene, y me abre el portal.

Cuando abre la puerta, ya se ha quitado el vestido de a noche y está con un pantalón corto y una camiseta, ella es guapísima se ponga como se ponga.

- ¿Has almorzado? - Ella niega con la cabeza - Pues vamos te invito a almorzar.

- No, no me pueden ver contigo en la calle, estarías en peligro, y tienes una hija no puedo ponerte en peligro ni a ti ni a esa niña.

- ¿En peligro? ¿Porque?

- ¿Querías hablar? pues te cuento mi verdad, Él que me intentó drogar a noche es mi ex, esta cicatriz - me enseña su espalda - me la hizo él, salí del hospital el miércoles por la paliza que me pegó porque un compañero de trabajo me trajo a casa, estaba en el portal esperando y me dio una paliza que estuve una semana en coma, ahí soñé contigo, con Chloe, con el pequeño Ayden y con Marie, pero se va a quedar en un sueño, no podría poner en peligro a ninguna persona por mi culpa, te agradezco muchísimo lo que hiciste por mi a noche, lo último que recuerdo de a noche fue cuando me llamo zorra cuando te sonreí.

Me acerco a ella, hay mucha distancia entre los dos, pero ella da un paso atrás, vuelvo a acercarme, sé que detrás de ella está la pared, y cuando se muerde el labio, paso mis dedos por ellos.

- Soy grandecito, deberías dejarme elegir, ¿Puedo besarte? - ella niega con la cabeza - Entonces vamos a almorzar.

- No voy a salir. - me dice ella aún tímida.

- Entonces quieres que te bese. - le digo sonriendo.

- No me pongas esa sonrisa, joder, no puedo salir contigo, no voy a salir. - se enfada.

- Mi Patri gruñona existe. - ella sonríe - me encanta tu sonrisa.

Entonces la beso, y noto que ella tampoco quiere separarse, subo mis manos por sus piernas y noto como se pone nerviosa, pero no aparta mis manos, bajo mi boca a su cuello, y ella estremece, sonrío, levanto su camiseta, estoy atento a algún cambio pero ella no me aparta y entonces se la quito, sus pechos son preciosos, paso mi mano por su espalda y la acaricio y cuando llego al broche de su sujetador se lo desabrocho, ella está nerviosa.

- ¿Quieres que pare? - ella niega con la cabeza.

Entonces me meto un pezón en mi boca, lo chupo, lo humedezco, ya están bastante duros, pero voy al otro y le dedico el mismo tiempo, ella jadea, y me encanta escucharla, vuelvo a su boca, meto mi lengua en su boca y ella me devora, con mi mano desabrocho su pantalón y siento como sus piernas empiezan a temblar.

- Si quieres que pare me lo dices y paro. - susurro.

Pero ella me niega con la cabeza y me desabrocha mi camiseta y como sé que es mas tímida de lo que yo soñaba me quito la camiseta y mi pantalón, tengo una erección que me duele de lo dura que la tengo, solo quiero enterrarme en ella, pero necesito primero que deje de temblar, hasta que esté tranquila no lo haré, así que sigo besándola, bajo su pantalón y meto mi mano dentro de su tanga, y noto que por más nerviosa que esté ya está bastante mojada.

- Me encanta que siempre estés lista, pero necesito que dejes de temblar, disfrútalo, solo disfruta.

Ella sonríe y con mis palabras se relaja, noto como deja de temblar y vuelvo a besarla, entonces doy un tirón de su tanga ella vuelve a sonreír, la cojo en brazos la apoyo contra la pared.

- Hazlo. - me dice segura.

Entonces me entierro en ella, ella gime, y yo con ella, entro y salgo como recuerdo que le gustaba, y ella lo está disfrutando lo veo en su cara, beso su boca, y entonces noto como ella llega, grita de placer y al escucharla llego yo con ella, entonces escuchamos el timbre.

- Mierda, es Alex. - Dice asustada. - tiene llave entra directamente.

Se hecha a correr a la habitación y yo cojo mi ropa y la sigo.

- No salgas por favor. - me vuelve a decir.