C49 Capítulo 49 Ayden

Ella entra aún noto en su cara el enfado y más lo noto cuando me dice buenos días, y cuando rechaza mi beso sé que está muy enfadada, le pido perdón, sé que a noche me pasé, sé que ella siempre ha sido la madre de Chloe igual que la de los tres hijos que tenemos.

Entonces me hace una pregunta que me sorprende, como no voy a ser feliz, si la tengo a ella.

- Claro que lo soy.

- Entonces ¿Porqué tanto empeño en querer otro hijo?

- No lo sé, podemos permitirnos tener más hijos y siempre he querido una familia grande.

- Ayden te mentí, hace un mes cuando me hice la prueba de embarazo, dio positivo... pero yo no quiero, no se como decírtelo... haber cariño no me arrepiento de ninguno de mis hijos, lo sabes.

- ¿Quieres abortar? ¿Enserio?

Ella agacha la cabeza, sé que si me esta diciendo esto es porque de verdad lo siente, pero me duele que sabiendo que yo quiero ella no se lo piense.

- ¿Desde cuando lo sabes?

- Desde que me hice la prueba.

- ¿Y porqué no me lo habías dicho?

- Porqué no sé, Ayden se lo cuanto deseas este hijo, pero creo que con los que tenemos ya es suficiente, cada vez que salimos de viaje es una odisea, luego mis embarazos... sabes que siempre han sido muy complicados, ya solo por el tema de la anemia y después me vas a pedir que me quede encerrada en casa para no arriesgar, y para que pueda comer a mis horas.

- ¿Porqué me mentiste?

Ella me mira tiene lágrimas en los ojos, pero joder yo también debería poder opinar.

- ¿Podemos hablarlo? ¿O ya tienes la decisión tomada?

- Si ya hubiera tomado la decisión ya hubiera actuado. Ayden eres mi marido, y yo ya no soy aquella chica inmadura que conociste. Y cuando fui a la ginecóloga me lo confirmó, me dijo que tenía hasta la próxima semana para pensármelo y pienso que lo justo es que tu lo sepas.

- ¿Y yo puedo opinar?

- Sé cual es tu opinión... tu quieres tenerlo.

- Y tu no... ¿te has hecho pruebas de anemia?

- Ayden... mírame. - entonces la miro - solo quiero saber porqué es tan importante tener otro hijo para ti, porque tienes tantas ganas.

- Porque Patri, contigo tendría diez hijos si pudiera, porque esos pequeños que tenemos son la muestra de lo cuanto nos queremos.

- ¿Y si lo tengo no me vuelves a pedir otro?

- ¿Lo estás pensando tener?

- ¿Es importante para ti este bebe? - Yo asiento. - Vale Ayden.

Entonces se levanta y se dirige a la puerta.

- Patri. - Ella me mira - ¿Qué vas hacer?

Entonces sin contestar sale del despacho. Unos segundos después tocan.

- Pasa.

- Buenos días cariño, ¿podemos hablar? - pregunta Patri.

- ¿Me estás vacilando?

- ¿Podemos hablar?

- Claro.

Entonces se me acerca y me besa.

- Te perdono por lo de Chloe.

Entonces coge mis manos y se las pone en su vientre.

- Dentro de siete meses serás papá, te quiero, y sabes que por ti, podría hasta morir, pero también te diré que trabajaré no dejaré de trabajar, la promesa de que comeré a mis horas la cumpliré sabes que siempre lo hago, pero no me quedaré en casa.

Entonces la abrazo, le doy un beso al cual ella me responde.

- No digamos nada todavía. - me pide.

- ¿Porqué?

- Pedí cita con mi ginecóloga el lunes y cuando sepamos que todo está bien, ya sabes que soy un poco paranoica.

Entonces se da la vuelta para irse.

- ¡Ah! y vamos a desayunar mi madre hizo creps, y necesito que estés allí para que me protejas de sus collejas.

- Ahora voy cariño.

Veo como se va.

- Patri. - ella e vuelve a mirar - no podría haber elegido mejor mujer como esposa y madre de mis hijos te amo.

- Y yo a ti. - me lanza un beso y se va.

Llamo a mi equipo de seguridad, ahora que se que Pablo está suelto y Patri vuelve a estar embarazada, no quiero que este indefensa. Sé que no le gustará nada esta decisión que tomo, le encanta coger el coche e ir a buscar sola a los niños, pero no quiero arriesgar con nada.

Salgo al despacho y me voy a la cocina, vuelvo a escuchar como su madre le dice que deje de hacer eso, y sé lo que está haciendo sonrío y entro en la cocina y la veo metiéndose la cuchara de chocolate en la boca.

- Déjame a mi mama. - le dice Patricia.

- Ni se te ocurra, luego te salen caries, dame esa cuchara.

- Si no se pareciera a ti, nadie diría que es tu hija. - suelta su madre.

- Los otros dos se parecen más a su padre, así que la mayor se parezca a mi tampoco está mal. - Y entonces sin ni siquiera mirar suelta - Alba Patricia deja esa cuchara, ni se te ocurra.

- Montse si Patri no se pareciera a ti nadie diría que es tu hija, de tal palo tal astilla. - Rio.

- No me digas Alba Patricia.

- Así te llamas, como te voy a decir sin no es por tu nombre.

- Solo Patricia. - y sale enfadada.

- ¡Oye! ¿Patricia que te pasa? - le pregunta Patri.

Pero la niña sale de la cocina corriendo.

- ¿Qué ha pasado?¿Me he perdido algo? - dice Patri.

Entonces sale de la cocina detrás de la niña de sus ojos.

Montse vuelve esa tarde para Barcelona, y Alex y Pedro con sus hijos para Madrid.

Y por la noche decido tener la conversación pendiente con Chloe.

- Chloe.

- Ya lo se Papa, estoy castigada, lo siento.

- A noche te pusiste en peligro, y si estarás castigada durante un mes.

- ¿Un mes? pero la próxima semana es el cumple de mi novio.

- ¿De tu que? ¿Mama sabe que tienes novio?

- No, a noche no pude hablar con ella, estaba enfadada por como llegué, pero porfavor papa no me castigues, déjame ir a la fiesta.

- No. Estás castigada.

Vuelvo a la habitación Patri está allí ya preparada para dormir.

- Dime que no sabías que Chloe tiene novio.

- ¿Chloe tiene novio? ¿Es broma?