C79 Capítulo 79 Ayden

Cuando me dice que ha visto unas fotos con una chica sé a quien se refiere y aunque nunca llego a pasar nada, casi lo hago, en el momento que recordé lo cuanto la quiero, lo cuanto la amo me di la vuelta y me fui, pero sé que aunque le cuente esto ella me va a odiar, no la he engañado, nunca pude hacerlo, pero en un momento de debilidad casi lo hago.

Ella se baja del coche y yo de la rabia arranco, voy directo a la oficina, no queria acabar el día de hoy así, ella no se lo merecía.

Mi secretaria entra en la oficina y le grito que salga que no me moleste, lanzo una silla contra la puerta, me pongo una copa y detrás de esa vienen muchas más.

Vuelvo a escuchar la puerta y lanzo el vaso contra la pared, y cuando escucho su voz, como explicarle cuanto le quiero, diciéndole que casi la engaño, con ese error la he perdido. Le explico, todo, ella se lo merece, y me vuelve a preguntar si me he acostado con alguna otra, y como explicarle que nunca he querido otra en mi brazos desde que estoy con ella, después de las fotos que habrá visto.

Pero me besa y me sorprende y yo respondo a ese beso, la quiero, la amo...

Y grita.

- ¿Contracciones? ¿Pero no estas de cinco meses?

- Por eso es pronto. - y vuelve a gritar.

La cojo en brazos y la llevo al coche.

- Ayden has bebido, no deberías conducir.

Y veo como aparece Damien, le lanzo la llave del coche.

- Llevanos al hospital. Rápido.

Al llegar al hospital le ponen una medicina para parar las contracciones. Ella está cansada, yo me quedo en la puerta esperando y entra una enfermera a atenderla y yo salgo para llamar a casa.

- Voy a casa a buscar a Patricia..

- ¿Está llorando? - dice enfadada.

- No te pongas así, será peor, la traigo para que vea que tu estás bien.

- No te ha visto y se ha vuelto a preocupar.

Le doy un beso en la frente, tengo miedo a que me gire la cara si me atrevo a dárselo en los labios.

- Te amo.

Pero ella solo asiente.

Cuando voy saliendo, escucho como me llaman y al girarme, me encuentro con esa chica por la que Patri, está a punto de dejarme, y mirándola es que ni siquiera me gusta, no sé en qué momento iba a cometer semejante error.

- ¿Me vienes a buscar? Salgo en dos horas.

- Lo siento, como te dije estoy casado.

- Con los mensajes que me has mandado, te importaba muy poco, o eres de los que habla y no actúa. Quedamos esta noche en el bar de siempre, llevo unas semanas sin verte por allí y después de aquella cena, quiero probar esos labios.

- Tengo prisa.

Me voy, donde me he metido... pienso, solo espero que Patri no la vea, no se si en esas fotos le pudo ver la cara, pero espero que no.

Al llegar a casa, todos me miran mal, excepto los más pequeños que vienen y me abrazan.

- Ayden, ¿que coño estás haciendo? - me recrimina Alex.

- Alex no te metas.

- ¿Que no me meta dices? Has destrozado a mi mejor amiga, que dejó todo por ti, todo y tu me dices que no me meta.

- ¿Dónde está Patricia?

- En el hospital por tu culpa. - dice enfadada. - Pedro se ha ido a un hotel porque si llega a estar aquí te mata, que lo sepas, tu suegra se ha ido con tu madre porque no puede mirarte a la cara, tu hija Patricia no ha dejado de llorar, Chloe se ha ido a casa de su amiga porque no quiere ver a su padre ¿y sabes porque yo sigo aquí? Por mi amiga, porque ella se merece alguien mejor, te lo dije en su día Ayden, Patri se merece alguien que la respete y tu le has fallado.

Y sus palabras son de verdad, sé que le estoy haciendo daño, le hice daño aunque no la haya engañado, pero no quiero escucharla.

Subo a buscar a mi hija, está en su habitacion llorando.

- ¿Donde está mama?

- Mamá está en el hospital, ¿te llevo a verla?

Ella asiente, coge una chaqueta de su armario y baja conmigo.

- ¿Porque lloras?

- Volviste a dejar sola a mamá y en el día que tendría que ser feliz, mamá Hoy había vuelto a sonreír como me gusta, y cuando te fuiste volvió a sonreír solo por hacerme feliz, pero ella no lo era.

- Cariño, los problemas de los adultos son más complicadas, pero espero que todo se solucione.

Cuando llegamos al hospital están haciendo unas pruebas a Patri y nos piden esperar fuera.

Su genicologa sale y nos dice que podemos entrar. Ella está hablando con la enfermera. Y no se dan cuenta que estamos esperando.

- ¿Dónde está Lilian?

- Está de baja, pero no se preocupe yo estaré pendiente de usted, solo serán unas horas y podrá irse. Antes de acabar mi turno. ¿Es el primer bebé?

- No, tengo 4 hijos, aunque la mayor no la parí yo es mi hija también, ya tiene diecisiete y cuando empecé con su padre ya tenía ella cinco años, luego mi primera niña tiene diez se llama Patricia, luego esta Marie con cinco es nuestro arcoiris y por último nuestro dinosaurio Ayden.

- ¿Ayden? Es un nombre raro, es la segunda vez que lo escucho, el otro es un hombre al que me quiero ligar. He quedado con él esta noche, llevo semanas detrás, pero sé hace de rogar, ni un beso ne ha dado, pero esos labios hay que probarlos.

- Si, aquí en Francia no hay muchos, yo solo conozco los dos míos, mi marido y mi hijo que lleva el nombre de su padre.

Entonces mi pequeña Patricia interrumpe.

Y cuando se da la vuelta no me lo creo.