C50 Capítulo 50: Es culpa mía
Sin embargo, su marido no era muy generoso y no le gustaba que Rebecca fuera de compras. La única vez que le compraba regalos como joyas era en su cumpleaños, en Navidad y el día de su aniversario. A Rebeca no le hacía ninguna gracia.
Al enterarse de que Zara se divertía yendo de compras, gastándose el dinero de su nieto, se enfadó aún más.
Como era de esperar